Bienvenidos a otra recomendación de peli que da gustico ver pero que nunca hubiera ganado una palma de oro en Cannes (ni falta que hace).
Hoy os traigo una road movie (porque van en furgoneta a veces) de vampiros. Se la podría considerar como la hermana pobre de The Lost Boys, estrenada en el mismo año pero unos peses antes (Jóvenes ocultos se estrenó en agosto y esta en octubre), ya que ambas siguen la misma línea argumental (grupo de vampiros que captan -por medio de una joven vampira- a otro joven atormentado de la vida a pesar de tener una estabilidad económica), pero se nota que, en esta, había menos pasta.
Sin embargo, esta no desmerece nada al éxito de taquilla que tuvo su "hermana buena". El grupo de vampiros es más heterogéneo (con un vampiro malo mucho más viejo) que, a pesar de que no tienen piedad con los bares de moteros, tienen que ir escondiéndose en una furgoneta de mierda, huyendo del sol en cochambrosas naves industriales.
El chaval atormentado de turno, se une al grupo tras ser mordido por una bella vampira que, también está atormentada. Y dos que duermen bajo el mismo atormentamiento, se vuelven de la misma condición.
La peli, en realidad, está bastante bien. Un guión bastante sólido, narración correcta y las suficientes escenas vampíricas como para gustar a propios y extraños. Además la banda sonora la hacen, nada menos, que Tangerine Dream, lo cual no es moco de pavo.
A mi lo único que se me escapa es lo de curar a los vampiros con una transfusión. Y más se me escapa cuando lo hace el padre en un improvisado, pero bien surtido de cosas médicas, cobertizo de granja del medio oeste americano.
El final es de los chulos, de muerte de vampiro to guapa.
Y hasta aquí mi breve comentario sobre porqué es necesario ver esto. Es un win-win al aburrimiento.
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